Las computadoras no han nacido en los ultimos años , en realidad el hombre siempre busco tener dispositivos que le ayudaran a efectuar calculos precisos y rapidos; una breve reseña historica nos permite·, comprender como llegamos a las computadoras actuales.
Los chinos hace mas de 3000 años a. C. desarrollaron el ABACO, con Èste realizaban calculos rapidos y complejos. …este instrumento tenia un marco de madera cables horizontales con bolas agujereadas que corrian de izquierda a derecha, como muestra la figura.
En el siglo XVII, el creciente interes en Europa, por las nuevas ciencias, tales como la astronomia y la navegacion, impulso a las mentes creativas a simplificar los calculos. Habria costado años a los primeros cientificos calcular la vasta cantidad de datos numericos cuyos patrones estaban intentando descubrir.
En 1614, el escoces John Napier anuncio su descubrimiento de los logaritmos, permitiendo que los resultados de complicadas multiplicaciones se redujeran a un proceso de simple suma. Muy poco despues, en los años 20 del mismo siglo, se invento la regla de calculo, basada en los principios matem·ticos descubiertos por Napier.
PASCAL en 1642 crea una maquina mecanica de sumar, parecida a los cuenta kilometros que utilizan en la actualidad los automoviles. Pero Èsta tenia algunos problemas con las sumas largas; pero en 1671 LEIBNITZ le agrego la posibilidad de: restar, sumar, multiplicar y dividir. Su maquina estaba formada sobre ruedas dentadas, cada una de estas ruedas tenia diez dientes, Èstos correspondian a los numeros del 0 al 9. Siendo el sistema de tal tipo, que el paso de 9 a 0 daba lugar a un salto de la rueda. Es así como se le da paso a La revolución informática iniciada hace cincuenta años e intensificada en la última década mediante el incesante progreso de las nuevas tecnologías multimediales y las redes de datos en los distintos ambientes en los que se desenvuelven las actividades humanas, juntamente con la creciente globalización de la economía y el conocimiento, conducen a profundos cambios estructurales en todas las naciones, de los que la República Argentina no puede permanecer ajeno y en consecuencia a una impostergable modernización de los medios y herramientas con que se planifican, desarrollan y evalúan las diferentes actividades, entre otras, las que se llevan a cabo en los institutos de enseñanza del país.